sábado, marzo 20, 2010

Pola mola porque es pop



Un estúpido y desagradable cura cincuentón, profesor de Historia Universal en el colegio salesiano donde pasé gran parte de mis primeros años de estudiante, solía repetir clase tras clase la misma frase, sintiéndose cada vez más orgulloso de la brillantez y originalidad de su inteligencia:
"La historia es una sucesión de sucesos que se suceden sucesivamente".
Más allá de la memoriosa repetición de aquel sonsonete en este blog, poca cosa debe quedar de aquel tipo grandote y avasallador, un fascista confeso con pronunciado acento del norte de España.
Esta semana, por ese devenir imparable de sucesos que van (con)formando nuestra vida, y a pesar de la anónima gripe blanca que casi logra que expulse los pulmones por la boca, pude acercarme a dos eventos literario-mundanos con tonalidades argentinas.
Del primero dije alguna cosa que otra en el post anterior; el segundo fue ayer por la tarde y quisiera ocuparme de él antes que los sucesivos sucesos futuros lo traspapelen para siempre en algún oscuro lugar de mi memoria.
Pola Oloixarac (¿un anagrama de Lapo Caracciolo?) presentaba la edición española de su primera y hasta hoy mismo única novela: Las teorías salvajes.
Buen título, sin duda. Podría habérsele ocurrido al cada día más mediatizado Zizek (el diario Público regala un libro suyo junto a la edición de hoy, sábado 20), también a alguno de esos modernos escritores franceses con apellidos en otro idioma. Hasta tipos como Faulkner o Nabokov no lo hubieran despreciado sin pensárselo primero.
Salvajes es una palabra atractiva que acompaña muy bien, con rítmica elegancia, tanto a las palmeras como a las teorías, otorgando un matiz ambiguo y feroz a las mismísimas, y por lo general domesticadas, mimosas.
Si el alargado espacio underground -vulgarmente llamado sótano- de la librería Central del barrio del Rabal, estaba a tope de gente, también la calefacción parecía haber sido elevada al tope mismo de sus posibilidades. A posteriori, y viendo cómo se desarrolló el acto, podría pensar que era parte de una cuidada puesta en escena que preveía el despojamiento por parte de la joven autora de su abrigo negro de lana, recatado escudo de posteriores y turgentes descubrimientos.
El día anterior, preguntado el escritor Fogwill por esta señorita hasta ahora desconocida en España, había elogiado, y en este orden, sus dotes canoras -Lady Kavendish es su otro seudónimo artístico-, el indudable interés del libro que había escrito, su perfil multimedia y, con un ligero cambio en el tono profesoral del discurso, otros perfiles tanto o más desarrollados, según él muy notables, en el físico de la compatriota.
Ayer, mientras el joven autor español Javier Calvo abusaba de los "digamos" casi tanto como de la extensión de su panegírico -entre otros elogios igual de contundentes comparó la Poloprosa con la siempre certera escritura de papaíto Nabokov-, la autora, ubicada con su silla dos pasos más atrás que el resto de los contertulios -cuatro en total, incluyendo a los dos editores- se mostraba tímida, indecisa, ausente, dulce, esquiva, sonriente, sensual, caprichosa, aniñada y un poquitito sexy, no necesariamente en este orden. Todo muy Lolita Nabokov, sin duda. En algún momento, aún convaleciente de mi gripe blanca, pensé si la cabeza no se me estaría yendo definitivamente a los cerros de Úbeda, ya que se me mixturaba la presentación del Pololibro con las que solían ofrecer algunas estrellas del Festival de Cine Erótico de Barcelona del cual fui jurado durante tres ediciones.
Finalmente llegó el turno de la autora. Después de desprenderse del abrigo dejando en evidencia la vertiginosa hondonada que separaba sus prominentes senos, Pola O' intentó devolver el micrófono a su presentador para que continuara discurseando él:
-Sí, por favor, prefiero que hables tú...me encanta quedarme como estuve hasta ahora, escuchando las cosas que dices de mí...Yo ya escribi el libro, así que no tengo nada que decirles.
Esperé unos segundos y cuando se hizo evidente que frente a una declaración de tal contundencia por parte de la autora nadie se atrevería a agregar absolutamente nada más, lancé mi primera pregunta:
-Me gustaría saber si la Argentina, o la Buenos Aires que tú vives, se parece a esa tan mítica, tan culta, tan misteriosa y elogiable, de la que nos habló el presentador de tu obra.
Éste, que confesó no haber estado nunca ni siquiera cerca del Río de la Plata, se había deshecho en elogios sobre el país y su gente, retratando una Argentina donde todos parecían egresados de una licenciatura superior de filosofías y letras. Un país mítico que aparentemente prestaba más atención a un match verbal entre Sábato y Borges que a un enfrentamiento deportivo entre Boca y River.
Tuve que matizar la pregunta varias veces. Era evidente que la señorita Pola no entendía lo que le estaba diciendo y su incomprensible incomprensión se traducía en quejiditos, movimientos de manos y cabeza y la repetición letánica de algunas frases entrecortadas del tipo: "no entiendo, no sé de qué me está hablando, qué tendrá que ver esto conmigo".
Cuando me di por vencido, cambié la pregunta por una confidencia:
-Ayer Fogwill habló muy bien de ti. Dice que tu libro le resultó interesante, que cantas bien y que además estás muy buena...
-¿Fogwill dijo eso? Lo de cantar fue en un momento, no tiene importancia...Soy soprano y canto Mozart en mi casa, pero ese video de YouTube...¡Qué gracioso! Él es muy viejo... podría morirse en cualquier momento.
-También nos confesó que había escrito Los pichiciegos en tres o cuatro días. ¿Cuánto tardaste vos en escribir tu novela?
-¿Yo?...Tres años...
-Se dijo que sóis una generación de parricidas, que estáis decididos a acabar con los escritores argentinos clásicos, los más reconocidos fuera del país. ¿Es eso así?
-¿Los anteriores...? ¿Quiénes, Borges?
Asiento con la cabeza mientras digo:
-Por ejemplo...
-Para mí Borges es como una abuelita, no me molesta...
Poco después mira a su editora y, volviendo nuevamente la vista hacia el público, nos suelta:
-¡Cómo preguntan aquí! En Argentina nadie pregunta nada.
¿Tanto ha cambiado mi país de origen? ¿Ustedes se lo creen? Yo no, en absoluto.
De cualquier forma se da por terminada la conferencia de prensa y los que han comprado el libro se acercan a la mesa para que la señorita Pola se los autografíe.
Ella saca del bolso un lápiz de labios color rojo oscuro y, antes de estampar su firma, deja la marca de un beso sobre la primera página.
Me dirijo hacia la puerta esperando poder salir de allí cuanto antes, sin atascos ni complicaciones. Temo un efecto Angel Exterminador y además mi cabeza es un hervidero de preguntas sin respuesta.
¿Habré sido abducido por las fuerzas demoníacas del ya desaparecido Festival de Cine Erótico de Barcelona o todo esto es un capítulo especial de Gran Hermano XX y de un momento a otro aparecerá Mercedes Milá anunciando que tuvimos la suerte de presenciar un experimento sociológico de alcance planetario?

Las teorías salvajes descansan al lado de mi cama. He leído solamente un capítulo. Todavía no entendí de qué va, pero parece estar muy bien escrito.

Esto es una recreación -no demasiado libre aunque tampoco demasiado exhaustiva- de lo que me cuenta la memoria. Como ella acostumbra ser artera y discriminatoria y yo no acostumbro tomar notas ni hago grabaciones de ningún tipo, que nadie me acuse de no ser imparcial. Ni siquiera he pretendido serlo. No olviden que otra de mis ocupaciones ha sido durante años la caricatura.

En las imágenes: la autora, el presentador, el editor.
En la última foto (para los descreídos) Pola firma un libro en el que un momento antes ha estampado su huella labial. Muy cerca, envuelto en su caparazón negra, el lápiz de labios rojo pasión.

Posdata: Marina, mamá Chinchilla, Reina de las Aguas, me ofrece un premio junto a otros seis bloggers amigos. Pide a cambio siete secretos confesables y de esos ya no me queda ninguno. Un beso y muchas gracias, cariño.

57 comentarios:

Antonio Tello dijo...

Querido D., "Los heraldos" -jóvenes escritores argentinos compilados en "La erótica del relato", Adriana Hidalgo Editora- dicen "del parricidio no podemos jactarnos. La dictadura nos dejó huérfanos". No se refieren a la tradición literaria, sino a la generación precedente y sus textos son un intento de puente sobre la herida para conectar con la tradición literaria del país.
Infiero de tu post, que no es esta la actitud de la joven Pola, a la que quizás habría que advertirle que para matar al padre hay que conocerlo. Los huérfanos -como se declaran los Heraldos, y los ignorantes no pueden.
Un abrazo

Beatriz dijo...

Buenísimo Post Dante, me gusta esta crítica sutil tan llena de perspicacias, desentrañando desde el fondo hasta lo más evidente, Tus juegos de palabras divierten, informan y ¡alertan!.

Un beso (desengripándose).

LB dijo...

http://muymuytantan.blogspot.com/2009/03/punto-final-para-lts.html

te interesara este post excelentemente escrito

Dante Bertini dijo...

Tello:
pareciera que a ella/ellos no les interesa el pasado literario, como si Arlt, Bioy, Manucho, Conti, Marechal, Macedonio, Pizarnik y cientos de otros no hubieran existido jamás, abriendo el camino para una trascendencia exterior que ellos posiblemente no tendrían de haber sido así.
Arrasar es el verbo que utilizan; les da igual (?) la izquierda militante que la derecha elitista, aunque en realidad atacan más, por el lado de la ironía y el ninguneo, a la primera.


Beatriz:
una nada extraña pareja esta que me visita. Gracias.
También yo me desengripo, poc a poc y sin una mejoría total que por el momento se ve no tan cercana.

Abrazos, besos

Emma dijo...

Pero, al final, es una impostora o no? No te pido que me lo digas, puedo deducirlo por tus agripadas palabras. Guapa es, rabiosamente, y tambien divertida. Asi que, bienvenida sea.

Naia Marlo dijo...

"la historia es una sucesión de sucesos que se suceden sucesivamente" esta frase me encanta y resume todo.
Maravillosas, Perfumadas y Salvajes... Mimosas
¡No terminamos de asombrarnos de las cosas que experimentamos todos los días!
Las fotografías me gustan mucho. Ella es una mujer atractiva y con cierto aire de misterio !!

Te dejo un abrazo muy sereno y un beso grandote.
Naia

Me alegra verte en el blog dejando tú reflexión, Gracias.

Dante Bertini dijo...

Emma:
guapa es, y mucho; de divertida no le encontré demasiado, pero teniendo en cuenta lo aburridos que son muchos otros escritores, ella tiene un punto más chispeante, es verdad.
Lo de la impostura me lo callo.
Desde ya, autora y libro no parecen salidos de la misma madre.
Algo que sucede cada día en las mejores familias.



Naia:
recibí tu cuestionario, que no se todavía si tendré ganas de contestar. Veremos mañana si me levanto con ganas de hacerlo.

La frase debe ser rotunda porque no la olvidé en todo el tiempo transcurrido.
Estás muy bien en esa foto: pareces la hermana menor de la anterior. ¿Es actual?
Voy mejorando bastante, aunque lentamente.
Antes había pasado por tu dirección y me pareció que no admitías comentarios...aunque la gripe vuela un poco la atención.
Un beso para tí y un saludo a los dos hombres de la casa.

Liliana dijo...

Podríamos decirle al presentador que se dé una vueltita por Buenos Aires de noche, que recorra Florida entre Corrientes y Lavalle, y luego que elogie esta ciudad.
Y a la chica, que lea su libro, a ver si aprende a responder.
Sobre el abuelito Borges, déjame decirte que hay toda una generación que asegura haber descubierto el agua tibia.
Un abrazo y que te mejores.

Lansky dijo...

Genial reseña de tremendo evento, Dante, que dirían por allá. Y sí: la niña parece estar muy buena y probablemente también 'está' muy lista.

Mari Pops dijo...

espero tu opinion para cuando acabes el libro?

como te sentis hoy?

Dante Bertini dijo...

Liliana:
contundente! o con tu diente, ya que se lo has clavado hasta la propia médula...
En cuanto a esta niña tan mediática, se hace poco creíble que no pueda responder preguntas tan básicas, que ni siquiera tienen que ver con la literatura o el saber literario de forma directa. Veremos: con los tiempos que corren, podemos encontrarla convertida en una gurú.


Lansky,
gracias. Más allá de ella misma, debo reconocer que su presentación fue, al menos para el que esto escribe, de lo más entretenida.
Está muy buena, no se si tan lista.


MaryPop:
me está costando seguirlo. Tengo tres o cuatro libros que picoteo al mismo tiempo: un Bolaños ya abandonado, un Zizek "en vías de desarrollo", Fogwill, cuentos para leer cada tanto, y este de la señorita Pola.
Si lo termino lo diré.
Hace días que me siento mucho mejor, gracias.

Saludos, abrazos, besos: podéis quedaros con lo que más os guste.

Raúl dijo...

Voy a acogerme a tu homilia final (el último y aliviador párrafo) como los perseguidos se acogían a sagrado en otras épocas. Prefiero pensar que tu entrada tiene más de caricatura que de crónica pues, en caso contrario, no quiero imaginarme cómo debió de pasarlo la autora.
Sonrío.

Anónimo dijo...

Tus fotos me gustan mucho. En el País leí que Fogwill sólo elogió su cuerpo y sus dotes de cantante de ópera... eso explicaba algunas consecuencias. También decía que tal vez ella hubiera abusado de los calmantes para la presentación y de ahí sus respuestas...
Bel

Dante Bertini dijo...

Raúl:
la autora se lo pasó muy bien hasta el turno de preguntas; después, ya en su piel, sin la cobertura elogiosa del presentador, comenzó a mostrar signos de agobio. Una pena.
Por suerte llevaba provisión de lápiz labial en la cartera.
Sonríe, sigue sonriendo, que así me gusta a mí.


Bel:
Esta chica! Abusar de calmantes...En los últimos tiempos los efectos de las diversas medicaciones son demasiado notables, hasta en nuestros mandatarios.
¿Será el Prozak lo que los hace reír inclusive frente a las mayores catástrofes?
No leo El País. Supongo que ellos también tergiversan, olvidan y traspapelan, aunque jamás lo confiesan ni se hacen responsables.

Marina Judith Landau dijo...

La frase de aquel cura es un trabalenguas que repetíamos siempre en técnica vocal, era una tortura para el compañero tartamudo del grupo.
El cura que describís es exactamente igual a un profesor de teología III que tuve en un instituto salesiano, casualmente.
Por lo que sé de esta autora, su verdadero nombre es Paola Caracciolo, la chica es egresada de Letras, con suficientes medios y contactos como para publicar y esas cosas... No he leído su libro, las referencias que tengo son muy malas.
Pero me ha divertido tu modo de retratarla. Vos te bancaste la situación y yo me diviérto leyéndote, je je
Lo del beso marcado en la primera página me superó!!!
He estado en alguna conferencia en la que alguien que no ha pisado Buenos Aires me la ha contado de ese modo. (pero, de qué estás hablando, willis???)
Cuidate, Dante, tomá mucho juguito de naranja o kiwis.
Abrazote grandote.

Marina Judith Landau dijo...

Gracias a vos, besitos!!

39escalones dijo...

Hay diálogos que ni Wilder, I.A.L. Diamond y Charles Brackett juntos...
Abrazos.

Lukas Rybensen dijo...

Magistral. Recuerdo que hace meses leí una reseña sobre ese libro y me quedó picando en la mente. Sobre todo al saber que la autora además de estar buena tiene formación filosófica. Aunque por lo que se sigue de tu escrito medio me decepcionó. Avisame si terminás de leerlo.

Un abrazo

Dante Bertini dijo...

Marina por dos:
casi no lo puedo creer...mi asqueroso profe de historia metido en ambientes teatrales? Un tipo que decía que Francia era la cuna del pecado y debía ser regada con sal para acabar con ella?
Habrá estado revolcándose en su tumba durante lustros, oyendo como los pecaminosos cómicos usaban sus palabras para adiestrarse en el arte del engaño!
¡Me has dado el día, para bien, por supuesto!
Pongo allí delante mi suposición de que su nombre es un anagrama de Caracciolo llevado al gótico-matrix.
El libro está bien escrito, repito. De su ideología dudo bastante, aunque recién lo empecé.
Te aseguro que no me banqué nada, no suelo hacerlo. Me lo pasé divertidísimo, en plan entomólogo.

Gracias a tí, muchacha. El regalo me lo hiciste vos. Besos

Dante Bertini dijo...

Alfredo 39:
es que me estás elogiando de la mejor manera posible?
Contento me quedo, aunque sea excesivo. Un abrazo


Luc:
no soy crítico de nada ni lo quiero ser, pero sucede que ella se muestra, y yo, que no la había leído, veo lo que me deja ver y lo hago con mis ojos, los únicos que tengo.
No te fíes de mí. Seguramente tu lectura será muy distinta a la mía.
Yo sigo pensando que Borges, como abuelita, era un lobo feroz.
Abrazo

Marina Judith Landau dijo...

No fue en ambientes teatrales. En mi juventud estudié Letras, cuando los horarios no me combinaron bien con el trabajo y la Escuela de Teatro, bajé mis espectativas y cambié la universidad por un instituto salesiano, a la carrera de Profesor de Literatura (un horror) ahí tuve a tu profesor (que debe haber sido clonado y habría montones como él)
De todos modos, una maravilla la imagen del cura revolcándose en su tumba...
Besitos.

Dante Bertini dijo...

Marina,
querida profe, leemos lo que queremos, o creemos...para mi lo de técnica vocal era indudablemente parte de tu formación como actora (actriz es tan feo como poetisa) teatral, cómica que dicen por aquí...de dónde lo saqué?
Nuestros tiempos no son los mismos, pero supongo que estos curas escapados de vaya a saber dónde nos tocaban por docenas, clonados, fotocopiados o simplemente educados bajo la misma sombra negra de la inquisición.
Un beso

pepa mas gisbert dijo...

A veces me da miedo, o mejor dicho, temo, conocer a un autor(a), porque entonces siempre asocio su obra con él/ella y claro, la cuestión no siempre coincide. O me pierdo buenas obras porque el autor me parece estúpido (digo me parece porque es por supuesto una opinión personal) o voy y leo obras no digo infumables, pero casi.

Que gusto da cuando ambas cosas están en un mismo plano.

Un abrazo

Lukas Rybensen dijo...

Jajaja. Borges fue, es y será siempre la vaca sagrada que (casi) todos los escritores argentinos querrán matar (los otros viven de sus ubres). Pero por ahora no hay nadie que la rasguñe.

Un abrazo

Dante Bertini dijo...

Alma:
habría que olvidar hasta las caras de ciertos creadores que nos gustan, quedarnos, gozar con sus obras, y punto. No se si Kubrik o Hitchcock eran especialmente agradables de aspecto y muchos compositores de música exquisita fueron bastante rechazables por sus ideas.
Somos curiosos, sin embargo, y eso a veces tiene su castigo. Un abrazo



Luc:
por qué no aceptar que fue un grande y quedarse tranquilito con eso?

Fernando García Pañeda dijo...

Empezando por el título y terminado con ese "todavía no entendí de qué va, pero parece estar muy bien escrito", me dan ganas de leer otras ddos veces más esta entrada.
Algunos, que no tenemos escote ni abuelitas borgianas, nunca llegaremos a nada, está claro.
Abrazos.

Dante Bertini dijo...

Feranado:
hágalo, dos, tres o cuatro, si le apetece...
no es que en estos momentos sobren los lectores ni los comentaristas.
Tal vez esté perdiendo carisma.
Un abrazo

Fernando García Pañeda dijo...

No, no lo creo.
Son otros los que se pierden, y se lo pierden.

Anónimo dijo...

No la lei, dicen que su novela promete mucho.
Me gusta que firme con un beso las hojas de los libros, yo hago lo mismo con los que dedico.

:)

besos

Dante Bertini dijo...

Fernando
(que no Feranado):
gracias.


Camiluch:
para gusto los colores.
Es un poco extraño verla pintándose cada vez los labios, no queda demasiado espontáneo, aunque reconozco que está en su derecho, a pesar de que yo quiero leerla (y que me guste), no besarla.
De cualquier manera a mi no me firmó, ni besó, nada.

Besos para tí, de a dos.

Raquel Barbieri dijo...

Dante,

Me gusta cómo vos presentás las situaciones y lo que puedo leer entre líneas.

No conozco a esta escritora. En lo personal, el dejar estampado el beso con rouge... me resulta vulgar, pero como a la distancia estoy fuera de contexto, no quiero prejuzgar.

Te envío abrazos con erres

PD: Renata está acostada dándome la espalda como si estuviéramos en una novela de Alberto Migré.
Achuchón para Federico.

Margot dijo...

Uffff, Cacho de pan, estoy ya mayor, muuuu mayor (y si recuerdo siempre lo estuve pero ahora ya con razón, ays de mí) para esta moda de escritoras-es sexys, eternas-os adolescentes que venden humo al igual que imagen. Aunque si me pongo femi, he de reconocer que en el caso de las mujeres empieza ya a ser indignante.

Vaya que mejor neuronas y humildad en el conocimiento que tetas vibrando y titubeando, sí, eso es! jeje.

Por otro lado su pregunta me pareció acertada y poco complicada (va a ser que mis senos se caerán en breve, eso será).

Besos, espero que ya recuperado!

Dante Bertini dijo...

Raquel:
veremos, decía un ciego. No se si triunfará con el carmín o será su ruina. Se lo había visto hacer a alguna cantante pop, a alguna estrella porno. Como escritora tal vez sea la primera.
¿Qué le hiciste a Renata?, diría una tía metementodo.
Migré, dios, cómo divertía mis tardes de invierno con deberes aburridos! Así me quedaban.
Besadas las erres por Efe y D;
varias veces, de frente o de espalda.



Margot:
te contesto y salgo hacia la librería Bertrand, a presentar poetas.
Estoy semi recuperado, al menos deseo que sea así; hoy necesito poder hablar sin disfonías...
Esta chica quiere dar que hablar y lo consigue.
Antes se era mediático a partir de un hecho o una obra. Ahora es necesario ser mediático para cualquier cosa que quieras vender.
¡Que la poesía nos proteja!
Besos

Lukas Rybensen dijo...

Porque si uno es megalómano molesta tener la sombra de un gigante detrás suyo, aunque más no sea un mausoleo.

Lukas Rybensen dijo...

Ah, me olvidaba. Hay algo raro con las imágenes en tu blog. Fijate que algunas se superponen a otros y otras se pierden en esa superposición. Algo muy triste dado que las imágenes son muy buenas.

Dante Bertini dijo...

Luc por dos:
no se qué puede pasar, eres el primero que me lo dice.
Yo entré desde otro lado y compruebo que está bien...
Hoy tuve presentación con tres monstruitos sagrados de la poesía catalana...muy buena gente, pero agotador...y tu novia?

Margot dijo...

Que los poetas y los hados nos protejan!! porque los primeros solos me da que no, pobres...jeje.

Te he visto por Librería de bolsillo, soy una de las locas que colaboran en el blog, y me ha hecho ilusión verte por ahí. Ya ves, estoy de un sentimentaloide que... jajaja.

Fran Invernoz dijo...

Muy buen post, bien escrito, sutil, para gozar de las entrelíneas. Lo he entendido todo y no necesito hacer ninguna pregunta, mi estimado Dante, ¿no serás el de La Divina Comedia resucitado?. Si es así, para mí sos el Gardel de las letras. Cada día escribís mejor, te lo digo de todo corazón, de verdad. Mi modesta conclusión es que nuestros nietos y sus descendientes seguirán leyendo a Borges, pero de esta chica linda ni siquiera nosotros mismos nos acordaremos mañana mismo (25 de marzo de 2010) de su bonito rostro. Un afectuoso saludo para vos y para tus infatibles lectores que han publicado los comentarios precentes.

Lansky dijo...

Cuidadín, el que a Pola le parezca Borges como una abuelita es un comentario muy inteligente (¿a pesar de ella?). Lo es, sólo falta que sepa Pola que las abuelitas son las mejores cocineras, en este caso de literatura.

Dante Bertini dijo...

Matgot:
hay un nuevo link a vuestra página, como verás al costado.
Espero remedie un poquito tus melancolías.

Anónimo dijo...

Tienes raón, Dante... Ya sabes que el anterior alcalde tomaba antidepresivos, a saber lo que toma éste... algo que le estimula la glándula arboricida y antipatrimonio histórico

Anónimo dijo...

Perdón, olvidaba la firma de mi anterior comentario
Bel

Unknown dijo...

Profunda hondonada de sus prominentes senos?? me encantó esta frase :P

Dante Bertini dijo...

Martín Bolívar:
has entrado mientras subía un post sobre tu tocayo Kohan.
Solamente puedo decirte gracias, también con todo el cuore, por la exageración. Mi ego se convierte en un soberbio pez globo al que el oceáno no le basta y surca los cielos convertido en Montgolfier.
Un abrazo, estimado.

Lansky:
uno tu comentario al de Martín Bolivar para enviárselos en un suspiro a Pola, la de los besos rojos.
Es que si esta niña, además cocina bien...

Margot:
quise escribir Margot.

Dante Bertini dijo...

Isabel por dos:
acepto alcalde como animal no doméstico.


Fanma:
pues así los he visto yo, algo exagerados...Un abrazo

Anónimo dijo...

Dante: No se si va que cada vez que firme se pinte...yo una vez lo hice. Lo cierto es que siempre ya tengo el labio pintado.
Esta semana cuando termine de leer al gran Murakami seguramente la lea, el problema es que siempre que leo a Murakami, el resto de los libros me parecen basuras.
Y hasta ya se que pensare.

un beso.

Dante Bertini dijo...

Camiluch:
sonaba extraño, antiguo, como si escribiera con pluma y la mojara cada vez en la tinta...
No leí a Murakami. Empecé un libro suyo y no pasé de la primera página. Me sucede bastante.

Besos

Noemí Pastor dijo...

¿No te atreves a decir que el cura salesiano era vasco, como el pederasta ese que han enchironado en Chile? Vale, pues ya lo digo yo. Besos, caro.

Dante Bertini dijo...

Noemí:
es que no podría asegurarlo, aunque pensándolo bien, tal vez tienes razón tú. El vozarrón y el estilo no eran sureños ni catalanes, pero un aragonés o un asturiano...

odette farrell dijo...

Qué excelente relato Dante, en verdad que fue entretenido, tienes una manera de describir las escenas que es como si vieras la película :)))

Y vas a leer el libro de la sexy escritora?

Anónimo dijo...

Punto uno: parece que no hay manera de concebir que una mujer guapa pueda ser además talentosa, ¿verdad? Si fuera un tío bueno que escribe seguro que los comentarios femeninos serían la mar de sutiles. Viniendo de un hombre (sea escritor o motorista, da lo mismo) hay que soportar todo tipo de metáforas referentes a lo paragolpes de adelante y atrás. Otra: que su genmeración mató al padre. Los argentinos siguen empeñados en no soltar el hueso del pasado, siguen emperrados en culpabilizar a alguien. Pero estos pibes ya lo saben, ellos no se sienten culpables porque ni siquiera habían nacido cuando fue la dictadura. En otros países se pasa directamente del pasado al presente, y de éste al futuro. ¿Se entendió? Ello lo entendieron, así que basta de culpabilizarlos. Y tu nota está clro que te la inventas. Lo cual no estaría mal si fuera en verdad graciosa y si,mejor aún, estuviera bien escrita. Que no lo está. Saludos
Pragolpes

Dante Bertini dijo...

Odette, estimada amiga: tu comentario se ha desprendido del tiempo y ahora me doy cuenta que nunca lo contesté. Te mando un abrazo esperando que te encuentre donde estés en plenitud y felicidad.
Dante.

Dante Bertini dijo...

Ay, señor anónimo!
Su crítica algo tardía me ha descorazonado.
Usted escribe tan bien que entender lo que dice, descifrar de qué lado está o qué pretende decir cuando opina, se hace como mínimo imposible. Supongo que es mujer dado lo ofensiva que encuentra la descripción de lo que presencié en un evento al cual tuve la poca suerte de asistir-con testigos que pueden confirmarlo- desde la primera fila.
En pocas palabras: esta mujer me pareció como poco atontada y lo único notable de su aparición en escena fueron la exhibición de su pronunciado escote y la manera tan (a) morosa conque se pintaba los labios frente al público. Equivalente a que un hombre sin ningún interés intelectual notable pusiera sobre la mesa su paquete mientras se atusa la barba. Además, a través de su rebuscada jerigonza puedo deducir que usted prefiere el silencio sobre los crímenes de la dictadura a cualquier verdad que le moleste. Y ahora vuelva a su anonimato, a ese lugar triste, oscuro y sucio desde donde seguramente se asoma.

Dante Bertini dijo...

ASÍ QUE PASEN CINCO AÑOS!!!
LARGA VIDA A ESTE BLOG.

Marina Judith Landau dijo...

LARGA VIDA A ESTE BLOG!!!!

ABRAZO GRANDE ♥

Dante Bertini dijo...

Querida!¡qué sorpresa verla nuevamente por aquí!
Malegra su visita, por supuesto. Revive las épocas en que los blogs, tan literarios, aún no habían sido desterrados por las caritas de facebook y las palabras contadas de twiter...
Y si volvemos?

Besos grandes. La visito.

Marina Judith Landau dijo...

He abandonado mis blogs, pero estoy considerando la posibilidad de volver...
mientras tanto, es un gran placer visitarte. Algo así como vi luz y subí a darte un abrazo