Ya se nos acabó la santísima Semana Santa de este año y dentro de nada estaremos preparando nuevamente las vacaciones del beatífico Agosto. Los sucesos se suceden de forma sucesiva y con periodicidad anual, marcándonos, con ritmo de marcha militar o paso de liturgia sevillana, las pautas sociales a seguir en cada uno de ellos.
Yo trato de evitar las aglomeraciones, así que rara vez aprovecho los asuetos que brinda con gran alharaca esta sociedad caníbal a sus obedientes asalariados.
No, no crean que me he puesto tardíamente contestatario (con el paso de los años, inclusive esta palabra de trinchera urbana setentera ha perdido fuerza y significado). La frase anterior es sólo un homenaje a mi recuerdo enternecido de la primera "pintada" que vi en Francia, treinta años atrás y apenas traspasada la frontera catalana. Fue en la cercana, hoy olvidada Perpignán, por aquellos tiempos capital de la pornografía para los todavía sexualmente censurados españoles.
"La société est une fleur carnivore"; la consigna me gustó tanto que hasta me hice una foto delante de ella.
Y hablando de carnívoros, ayer nuestros amigos cordobeses del Montseny nos invitaron a un asado en su acogedora casa-taller. Por aquellos parajes todavía arbolados, los pocos ejemplares que han aguantado absolutamente indemnes los embates devastadores de los últimos vientos otoñales, presque apocalípticos, están más que muy verdes, los cerezos y las mimosas han florecido con desparpajo y el silencio es tan sedante como el olor que desprenden los pinos, salvo cuando los perros con propietarios de tipo paranoide-psicópatico se ponen a ladrar a todo lo que se mueva frente a sus narices como forma de ganarse el pienso diario, al mismo tiempo que prueban con cada tirón descontrolado de su cuerpo la fortaleza y extensión de esas cadenas que les recuerdan su condición de obligados cancerberos domésticos. Extraña gente toda esta, que llega a un lugar paradisiaco y decide convertirlo poco a poco en un infierno. Talan los árboles más asentados y frondosos, propios de un bosque mediterráneo, para plantar especies tropicales que no resistirán al primer frío; alisan el terreno a golpe de topadoras y talonario, despojándolo, no sólo de esa personalidad que supuestamente los había cautivado, sino también de los espesos matorrales de plantas autóctonas, muchas de ellas aromáticas y comestibles. Su único propósito parece ser la construcción de enormes y descorazonadoras explanadas de cemento donde puedan aparcar al mismo tiempo veinte automóviles todo terreno y cincuenta ruidosas Harley Davidson.
Espero que un día se detengan a pensar por qué no son felices si han hecho todo lo supuestamente necesario para serlo.
Además de comer, pasear y conversar serranamente, he vuelto a encontrarme con Ven-gansa Sissi Ocarina después de varios meses de mutuo distanciamiento. Ella vive ahora con el resto de aves y aunque sigue bañándose con la misma dedicación placentera del último verano, ahora se pasea menos por las cercanías de la casa y pone cada tanto algún huevo que cuida con celo no discriminatorio, junto a los de las cuatro gallinas del pequeño corral. Se la ve totalmente integrada, y aparentemente feliz, con los otros animales de su clase.
Tengo una vaga y poco demostrable teoría sobre su adecuación actual a la vida corralera. Creo que finalmente ha desistido de vivir como persona, un insistente intento durante sus primeros meses de vida, frustrado con la misma insistencia por todos los habitantes de la casa a causa de su nula contención excretoria.
Los campesinos de Argentina llamaban "pato de campo" a esos personajes poco afortunados que cometen una cagada con cada paso que dan en la vida. Pues eso. Digamos que las ocas actúan en lo referente al intestino de la misma manera que los patos de campo, y la Ven-gansa Sissi Ocarina, a pesar de su encanto personal y de la distinción otorgada por sus numerosos, variopintos nombres, no resulta ser una excepción a esa fluida, a la vez que socialmente incómoda, regla de la/su naturaleza.
Para completar el día de manera festiva a la par que culta, los dueños de casa bajaron con nosotros a Barcelona y nos fuimos todos al cine Alexandra. Queríamos ver Las viudas de los jueves y llegamos a tiempo para la última función nocturna. Sin colas ni amontonamientos, con la afable tranquilidad de otras épocas barcelonesas menos turísticas y de apariencia más santificada.
Ahora no tengo ganas de hacer crónicas cinematográficas, lo siento. La semana que viene estaré otra vez en el Festival de Lleida, hartándome, mañana, tarde y noche, de cine latinoamericano. Quizás la crítica a la película de Marcelo Piñeyro decida hacerla Alfredo algún día de estos desde esos 39 escalones que hoy cumplían tres robustos años de vida, o la haga Liliana Sáez desde su Kinéphilo blog, mientras festeja su primer año de cinéfila existencia.
Fotografía endiablada de Ruven Afanador. Retrato en Perpignán por J.CH.
[image: Portrait of a Place: A Desulo]Portrait of a Place: A Desulo
Connected to the island’s customs and traditions through his Sardinian
mother, Italia...
Hace 4 días
37 comentarios:
Me ha impresionado ese pasaje: "Extraña gente toda esta, que llega a un lugar paradisiaco y decide convertirlo poco a poco en un infierno.", me recuerda a lo que Stendhal cuenta de los españoles en sus Crónicas italianas
Belnu:
yo ya lo sentí en muchos otros lugares, Ibiza sin ir más lejos. Si uno elige un lugar donde vivir, ¿no sería lo lógico pretender mejorarlo? Si buscas un paisaje no urbano, ¿no es estúpido convertirlo al poco tiempo en un remedo de ciudad seca y estéril, al más puro estilo "hereditario"?
Hay pueblos donde sólo puede vivir la muerte.
Qué buena/mala pinta tenías Bertini. El lema es bonito. A mi también me gustaba el del sous le pavés, ya sabes: 'Levantad los adoquines, debajo hay playas!
Y también evito las aglomeraciones, la masa...la detesto, la gente de una en una, todo lo más en grupettos.
Gracias, amigo Dante. Tomo nota para en cuanto la vea...
Magnífica pintada, vive Dios (desde ayer), pura sabiduría popular sin derechos de autor.
Abrazos.
Lansky:
sí, creo que hasta poncho pampa de tierras salteñas llevaba, rojo sangre si no me equivoco.
Juventud apasionada, corazón ardiente y muy poco dinero en el bolsillo.
Un abrazo sin adoquines
Alfred39:
ya me enteraré cuando la veas, si la comentas.
Si la sabiduría popular fuera siempre tan poéticamente reveladora...
Un abrazo
Cariño la verdad la frase es muy sabia, y tu estas de pelicula en la foto ese aire de chico malo me encanta!!!!!
Esperaba foto de Sisi Ocarina ya convertida en toda una adulta...
No hay nada como perderse en los lugares poco habitados y sobre todo poco tocados por la gente...este finde estuve en Begur y por lo pueblitos de alrrededor!!!! que belleza de lugares sin mano del hombrecasi...solo me hubiera gustado ver que todos los arboles caidos por las tormentas de nieve y viento que hubieron este otoño al menos los hubieran levantado...porque da pena ver como los arboles enormes terminan derribando a los mas pequeños por su peso...
Besitos y disfruta de tu semana cinefila!!!!!
Feliz lunes de pascua!!!
Gise,
yo me reconozco y recuerdo, aunque en esos días no tenía muy claro si quería estar aquí, en Europa, o volverme corriendo a Baires.
Supongo que los árboles caídos serán leña para los próximos incendios estivales, esos de los que nadie se hace responsable después.
La Ocarina no estaba para fotos y además no ha cambiado demasiado físicamente. Ahora tienen un perro, Terry, que copa todas las atenciones, mientras Sissi se la pasa tirada en el corral cuidando huevos.
A veces, viendo lo que hacemos con la naturaleza, quisiera pertenecer a otra especie.
Besos, muñeca. Y gracias por los buenos deseos. Los tuyos lo son siempre.
Qué maravilla tu foto con la pintada...
Y tan aguda (la pintada)...
Qué tiempos...
Un beso, B.
Como algún otro comentarista me detengo en aquellos que ansían vivir en el campo para irlo convirtiendo en su pequeña ciudad. Creen saber lo que quieren, o quizás lo sepan, pero lo buscan donde no está.
Un abrazo
Lena:
fue lo primero que vi al llegar a Perpignan y le dije a mi amigo que me sacara esta foto, con una cámara analógica... y no muy buena, por lo que se ve...
Sirve como recordatorio amable de una época que ya era pasado en aquellos días.
Beso
Alma:
no entiendo el criterio, la verdad.
¿Tienen espíritu de colonizadores?
¿O es solamente un afán destructivo, sentir que pueden hacerlo, que tienen más poder que la naturaleza, más poder que ese Dios en el que dicen creer?
Poncho salteño rojo... eso y una época gloriosa de mi vida, es lo mismo.
Yo también me quedé pensando en esa gente que transforma el entorno en otra cosa, diferente a la que lo sedujo y no me refiero solamente al paisaje.
"Las viudas de los jueves" sucede en esos espacios que muchos argentinos se encierran al aire libre, alejados de la realidad, especie de ghettos donde se amurallan con electricidad para disfrutar el verde de sus árboles.
¿Te vas a Lleida? Yo me quedo en Baires, a disfrutar el Festival de Cine Independiente... ya nos leeremos.
Un abrazo, Cachito.
Liliana:
supongo que todavía no hiciste la crónica, o sí?
Me gustaría saber qué piensas sobre esta película bien hecha, como casi todas las de Piñeyro, aunque sin dar en el clavo de lo que realmente quiere contar.
Buenas actuaciones, como siempre.
Cine por cine, los dos pegados a las pantallas. Un abrazo
Y no ha hecho todavía usted la crónica, pero que buena película nos ha narrado. Desde el ambiente raro de Semana Santa, las vacaciones del verano, la "juventud" del post mayo del 68, el cuidado de nuestra olvidada naturaleza, esa patria defendida por los indígenas y destruida por el progreso (me acuerdo de los Reyes de la Patagonia, parece que hay más de uno). Por cierto, hablando de cine, sería bueno escribir un guión sobre José Menéndez, perdón por ser tan insistente. Por último, es un placer, un gusto, ver la simpatía que le tienen sus propios lectores. Me incluyo. Enhorabuena, y a disfrutar del futuro pluscuamperfecto -creo que no existe, me parece que me lo inventé, nunca dominé eso de los verbos, bueno- a lo que me refiero es a las sesiones pantagruélicas del cine y a las ansiadas vacaciones del verano.
yo tb me habria sacado esa foto... tomo nota por si voy ;-)
Saludos
Yo también estaba dispuesta a croniquear "Las viudas de los jueves", pero quienes se me han adelantado me han quitado la intención.
Otra vez a Lleida. ¡Qué bien! ¡Qué chollo! Disfrútalo.
Bambú:
dado lo cuidadoso que son los franceses con su patrimonio, dudo que la leyenda siga en el mismo lugar...aunque nunca se sabe: igual es un recurso turístico más.
Noemí:
Yo dije que ellos podrían hacerlo, no que ya lo hubieran hecho.
Paso como en el póker, pero espero tu crónica, ¿vale?
Este año puede ser que Lleida resulte un chollo porque no voy de jurado, al menos en principio. Como soy un insatisfecho me pregunto si algún día me tocará Sanse o Venecia...
Gracias por los buenos deseos.
Intentaré disfrutar lo máximo posible.
Martín:
tienes razón, fue un día con exceso de película para mí. Hay tanta información por ahí afuera si uno quiere verla, que no son necesarios los medios...
El futuro pluscuamperfecto existe en la medida que acabas de inventarlo y es el que todos soñamos a cada minuto. Los académicos son un plomo a los que la ilusión les parece innecesaria.
José Menéndez; lo leí en tu blog, si no me equivoco. Veré si me entero de más.
Gracias por la simpatía y los buenos deseos. Ninguna de las dos cosas es prescindible.
Un abrazo.
Qué onda que tenés en esa foto, genial!!
Las cuestiones excretorias de Ven-Gansa Sissi Ocarina, me recuerdan a las primeras épocas de mi Charly, que tenía problemas intestinales y cada 5 minutos yo tenía que andar corriendo lavandina en mano. Cariñosamente yo le decía Mi GatoPato, jaja.
Seguramente ella estará feliz con sus amigas gallinas.
Siempre me dio indignación la gente que comete delitos contra el paisaje. Recuerdo una casa en Sierra de la Ventana, a la que los nuevos dueños le talaron todo el parque y le pusieron cesped artificial!!! sumado a una explanada de cemento horrible en la que estacionaban sus costosos autos. Afearon todo y no había ley ni consorcio vecinal que pudiera frenarlos...
Que la pases lindo en el festival, ya nos contarás.
Besitos.
Me encanta ver cómo sube tu contador de visitas!!! Habrá premio a la visita 150.000?
Yo mantengo una extraña relación con las fechas programadas, me gustan las tradiciones sociales que yo selecciono, pero aborrezco el conservadurismo. Pura contradicción.
Marina por dos:
se ha convertido en tu marca, verdad? Me gusta, lo encuentro teatral. Primero y segundo acto.
La foto es malita de calidad, tanto que traté de arreglarla un poco pasándola al sepia porque el gris era patético. Creo que no logré mejorarla demasiado.
La pared es lo que tiene mucha miga: de la época en que todavía había consignas interesantes y no sólo garabatos y borrones para molestar al prójimo.
Donde estuve no faltan ni los enanitos de jardín, que podrían tener gracia si no los pusieran en plan mausoleo. Y los árboles que se cargan, vaya asesinato.
Para qué hacer otra ciudad cuando hay tantas ya hechas.
Lo del premio... ¿qué podría ser?
Falta un montón, así que tenemos tiempo para pensarlo. Dame ideas, vale?
Federico y yo besamos manos y garras indistintamente.
Fanma:
tu viajas siempre y te mueves por el mundo sin necesidad de fiestas. Lo que pasa es que a veces te coinciden.
Todos solemos ser bastante contradictorios. Como que somos personas y no personajes.
Un saludo
No me cansaré de decírtelo.Me encanta leerte.Buenísima la foto con pintada incluida.
Ya lo creo que la sociedad es una planta carnívora.Ahora bien,los hay todavía que no nos acercamos a sus caprichos por miedo a ser engullidos.
Me alegra tener noticias de tu acompañante de Agosto ,Sissi Ocarina,y que esté jntegrada en su vida corralera.
Parece incomprensible que haya gente que cambie maravillosa y única vegetación, por terrorífico asfalto o pavimento.
Saludicos.
Carmen:
estoy aquí porque hay personas que, como tú, me dice, comenta, que le interesa leerme.
Si del otro lado hubiera silencio, si no existiera este diálogo, esta memoria amistosa que recuerda detalles y personajes y se divierte, entretiene, encanta con ellos, ya hubiera dejado de escribir mis posts.
Un saludico y hasta la próxima.
Me sumo a lo de no gustarme nada las aglomeraciones, las masas...estás en la foto como león posando para devorar el mundo.
Conocí hace veinticinco años,jo, cuantos a unos argentinos hippies que vendían bisutería por las playas norteñas , ella se llamaba Graciela y él se parecía mucho a ti.Le daban mucho al mate.
León semianónimo:
mi ascendente es Leo y soy muy felino; feroz, depende con quién y cuándo.
Pero no soy matero, jamás vendí nada en la calle -salvo, tangencialmente, mis libros en alguna odiosa "firmada" de Sant Jordi- y no fui hippie, aunque usaba, como casi todo el mundo civilizado, el pelo largo y otros símbolos, pocos y escogidos, de la época.
En Ibiza los artesanos argentinos enseñaron mucho sobre su trabajo, en cuero y metal, que nunca fue lo mío, a mucha otra gente, sobre todo del norte.
hum ,pero por ejemplo, suelo crear con mis amigos nuevas tradiciones, este año instauramos el thanks giving. Y pensamos repetirlo el año que viene...sospecho que en el fondo somos unos borrachos bulímicos que buscamos cualquier excusa para beber vino, comer hasta hartarnos y despellejar al que no acudió.
Perdon Cachito, pero Fanma que dia lo festejan??? digo como para pillar el Ave y llegarme a Madrid, jajajajajajaj!!!!!!
No me hablaron muy bien de la película, pero a mí el libro me pareció sensacional. Uno de los pocos premios Clarín que me gustó (si no el único). Un abrazo.
Fanma:
como gustéis, que diría el Pardo, perdón, el Bardo, o sea el inglés ese de las tragedias con su apellido...
Lo único que me asusta un poquitín es lo del despellejamiento: estaría obligado a irme siempre el último.
Luc:
la película no agrega nada demasiado nuevo y eso me parece culpa del libro, o del guión según como se mire. El problema, o no, actual, es que los guionistas de tevé USA son tan buenos, tienen tantos recursos, que es difícil no comparar. Y estos del filme salen perdiendo.
Querido Dante,
Me siento absolutamente identificada con lo que decís acerca de que hay gente que destruye los paraísos naturales convirtiéndolos en sitios diferentes, más feos, ruidosos (y estereotipados).
Y diste en el clavo, porque aunque aparentemente han hecho todo lo que querían para ser felices, no lo han logrado. Hay mucho desasosiego.
La destrucción de un ambiente natural cambiándole la vegetación y el suelo es una demostración más de "poder", de decir: "Tengo plata, hago lo que quiero", y de paso, al ignorar lo beneficioso de las plantas lugareñas y su fauna, están destruyendo más de lo visible.
Es una escalada negativa.
Me alegra en grado sumo tu reencuentro con Ocarina. ¡La recuerdo del año pasado!
Huyendo de las aglomeraciones psicóticas, te envío abrrrazos con erre de parte mía y de la que duerme la siesta y está roncando :)
Raquel,
me gustó mucho el nuevo paseo por tu casa, desde mis ojos de forastero.
Bonitos colores, buen clima, espléndido barrio, al menos por lo que pude ver.
Me preparo para Lleida: otro año más y esta vez sin trabajo concreto por medio.
No se si aguantaré.
Mis caballos están nuevamente volados.
Cada tanto me pasa.
Hay que volver a armar las maletas?
Casi siempre la respuesta es un sí.
Un abrazo a las erres, dormidas o despiertas.
A mí el único caso en el que me gustó más la película que el libro fue "Crímenes de Oxford" de A. de la Iglesia que le quita todos los vicios egocéntricos a "Crímenes imperceptibles" de Guillermo Martínez. Un abrazo
Luc:
me hablas de una muy buena película que no tuvo la suerte que se merecía.
Ya me hablaron de ese ego: alguien que lo vivió en forma directa y en Oxford mismo.
Abrazos
Hola Dante, Las aglomeraciones son molestas para las personas que estamos acostumbradas a sentir el silencio y la contemplación de lo que nos rodea. Pero es la dinámica de siempre cuando llegan fechas como, la Semana Santa. En este pueblo de la costa mediterránea, se lleno de personas del centro de España, buscando el sol y el mar, para descargar todo su estres, malhumor y penas. El ser humano se caracteriza de transformar todo aquello que toca, sea para bien o no. Con la naturaleza, más bien lo hace para desfigurarla.
En la foto estás muy "cumballá",¡hay aquellos maravillosos años!...la frase escrita en la pared identifica la época de revolución.Por ahí andaba yo también, haciendo mis "pinitos protestones y reivindicativos" libertad, libertad....sexual o de lo que fuera...
Te dejo un abrazo muy sereno y beso que lo acompaña, idem para Fede..
Naia
Hola Dante, Las aglomeraciones son molestas para las personas que estamos acostumbradas a sentir el silencio y la contemplación de lo que nos rodea. Pero es la dinámica de siempre cuando llegan fechas como, la Semana Santa. En este pueblo de la costa mediterránea, se lleno de personas del centro de España, buscando el sol y el mar, para descargar todo su estres, malhumor y penas. El ser humano se caracteriza de transformar todo aquello que toca, sea para bien o no. Con la naturaleza, más bien lo hace para desfigurarla.
En la foto estás muy "cumballá",¡hay aquellos maravillosos años!...la frase escrita en la pared identifica la época de revolución.Por ahí andaba yo también, haciendo mis "pinitos protestones y reivindicativos" libertad, libertad....sexual o de lo que fuera...
Te dejo un abrazo muy sereno y beso que lo acompaña, idem para Fede..
Naia
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