martes, junio 01, 2010

Encuentro Inesperado


Salgo de la cama como puedo y media hora después salgo también de mi casa, un poquito más compuesto. Ayer tenía cita con mi dentista a la misma hora en que debería haber tomado una clase de yoga. La contienda la ganaron mis dientes y, sobre todo, una inhabitual pereza: después de la clase del día anterior había quedado con pocas ganas de repetir asanas, equilibrios y estiramientos.
Encuentro la calle triste, semivacía. Puente, me digo. Si hasta mi casa ha perdido un componente, abnegado estudioso de las teorías lacanianas. Lacan y Sagaró, puedo asegurarlo, tienen más fuerza, mayor arrastre, que cualquier dupla política.
Yo me quedo en la ciudad, a festejar por la noche una boda civil diurna a la que no asistí porque en ningún momento fuí invitado a ella.
Los diarios hablan de recortes, las radios hablan de recortes, la gente de la calle habla de recortes. Debería ir a la peluquería, me digo. Es una forma como cualquier otra, aunque un poco más frívola, de no crearme angustias que después, en corto tiempo, me producen esas molestas caries que necesitan obligatorias visitas al dentista.
Anoche dormí profundamente, así que me cuesta entender por qué me levanté sin verdaderos ánimos de levantarme. Tal vez sea culpable el inconsciente, siempre tan artero, aunque también podría serlo una brisa fría, no menos errática, que acarició mi espalda mientras charlaba animadamente en la terraza de un bar cercano a casa.
El día de ayer estuvo cargado de emociones, casi todas ellas debidas a un reencuentro "con el pasado que añoro y que nunca olvidaré". El tango es acomodaticio, nos sirve para rellenar cualquier rincón con algunos trazos de nostalgia y un nosequé de poesía.
Fue por la mañana, cerca del mediodía. Me había parado a mirar plantas exóticas en la esquina de Córsega con Rambla Cataluña y de pronto oí una voz femenina con un suave, pero de cualquier manera inconfundible, acento porteño. Preguntaba algo, que en un principio no alcancé a comprender, a un empleado marroquí que parecía no entenderla. Poco después lo supe. La señora, muy menuda, de cabellera corta, alborotada y rubia, trataba de saber el nombre de una especie de cardo sofisticado en tonos verdes, rosas y ocres, la misma planta que me había subyugado a mí unos segundos antes. Soy curioso y participativo, al contrario de lo que sucede a mi alrededor -en esta ciudad quiero decir- donde la amabilidad, la simpatía y el buen trato se confunden habitualmente con el servilismo. Me siento bien comunicándome con la gente; si además puedo solucionarles algún problema nimio, orientarlos o contestarles alguna pregunta que me hacen, deteniendo el turisteo, me crece de los hombros la capa de Superman y un día cualquiera se transforma en un nuevo episodio de la saga "Dante B lo arregla todo". En esta ocasión tampoco yo sabía de qué planta se trataba, pero intervine porque en ese momento la dueña de la tienda, que había salido del interior para atender a la presunta clienta incomprendida, estaba diciéndole:
"Es muy raro que no la conozca... En su país seguramente existe".
"Soy del mismo país de la señora y tampoco la conozco", dije yo sin cortarme una hoja.
La señora rubia sonrió y en ese momento entendí que aquella cara, aunque con varias experiencias más encima, era la cara de alguien que conocía muy bien.
"¿María Julia?", pregunté tímidamente.
Ella dijo sí y enseguida quiso saber quién era yo. (Habré cambiado tanto que tan sólo por la voz me reconoció, tango)
No me voy a extender demasiado con esta historia.
"Voy a achicar el pánico", solíamos decir en la época en que ella y yo diseñábamos vestuarios para Crash!, un exitoso espectáculo del coreógrafo Oscar Aráiz en el histórico y desaparecido Instituto DiTella. En el lenguaje callejero juvenil de aquellos años quería decir "la voy a hacer corta, no te asustes". Por esto no voy a dar fechas precisas. Siglo XX, Cambalache, y con esto me planto. No tanto por mí, que también, por qué negarlo, sino por ella, una señora de elegante discreción y espléndido presente.
Gracias a Facebook, y en este gracias deberiáis detectar un deje de nostálgica ironía, pude comprobar cómo en general la vida nos separa para siempre y los posteriores reencuentros, virtuales o físicos, son poco más que un intento, por lo general vano, de rectificar una historia con un final ya escrito.
En este caso preciso, María Julia Bertotto y yo, ¿resultamos ser los mismos? ¿Volveremos a comunicarnos después de esta nueva separación, si bien lógica, también forzosa?
Podría decir sí o no con la misma incierta certidumbre.
Los dos vivimos nuestra vida con ganas, como nos permitieron y pudimos. Perdimos y ganamos, tuvimos y dejamos, y todavía hoy, después de todo el tiempo transcurrido, seguimos esperando algo más: ese que podría ser el más pleno y feliz, el mejor capítulo de nuestro, por suerte inacabado, diario íntimo.


POSDATA: este post estaba previsto para el domingo, pero luego se cruzó el tabaco con sus humos y recién lo cuelgo hoy. Sepan disculpar el cambio de fechas... y adáptenlo, S.V.P. Gracias. POSDATA 2: un regalo en forma de canción y con destino preciso, ya que no se si tendré tiempo de colgar nada más antes de irme para Madrid, Madrid, Madrid...(más información en mi blog amorimás)
Fotos: escena de Crash! y retratos por JChapuis.

50 comentarios:

Lukas Rybensen dijo...

Aguante Super Dante ;)

Este no es un comentario para que leas mi blog, dado que posteé algo futbolero que no creo te interese.

Pero me gustó esta entrada y la defensa de la muerte "poco gloriosa" de Dennis Hopper.

Un abrazo,

Luc

Mercedes Thepinkant dijo...

Yo también suelo pararme a mirar plantas exóticas en Córsega con Rambla Catalunya. ¿Sabes que está previsto que vuelvan a pasar los coches por ese delicioso trocito de calle peatonal? Tomar algo en esa terraza ya no será lo mismo.
Espero que "alguien" recapacite.
Felicidades por el feliz reencuentro.
Un saludo

carmen dijo...

Leído con gran agrado.
Adaptado queda.
Saludicos.

Dante Bertini dijo...

Luc:
por el momento aguanto, no se preocupe...
Ha picado mi curiosidad amarilla. Pasaré por ese blog suyo.
Un abrazo, extensivo a toda su familia... y amigos...


Carmen:
me alegro por el agrado, primo hermano de mi agradecimiento.
Salud!

Dante Bertini dijo...

Mercedes:
me das una noticia horrorosa, como te imaginarás...
Es el castigo por los votos en contra de su estúpida idea diagonal?
O es que nunca pudo vivir en el Eixample y quiere vengarse de su infausta suerte!
Bellacos! Espero que tengan su justo merecido.
Saludos

Lukas Rybensen dijo...

Gracias, Dante. Habría que armar un abrazo solidario para que Walter vuelva al blog, creo que eso le puede hacer bien.

Dante Bertini dijo...

Luc:
no hay nada que agradecer
¿nos ponemos manos a la obra?

Lukas Rybensen dijo...

Dale ;)

Gise =) dijo...

QUiero ver a Super Dante!!!! me encanta vivir tu vida a tu lado...cuando te leo es como si me llevaras en un hombro y cual Pepe grillo fuera disfrutando de tus encuentros, tus recuerdos, tu melancolia, tu pereza y tus alegrias!!!!!!!
Besotes amore!!!!

Dante Bertini dijo...

Luc:
venga!
:):):)


Gisella,
pupé, como estás?
Pepita Grillo: me gusta el nombre y el personaje.
Pongo el hombro y también el asombro.
Besotes italianos!

Belnu dijo...

Me encanta esa idea de los tangos que nos hablan de todo lo que nos pasa! Es verdad que las canciones parecen mandarnos signos a veces, sobre todo cuando estamos obsesionados, y nos hacen reír... Había una película, On connaît la chanson... Al final he cambiado de destino en Madrid, je t'expliquerai

jnj dijo...

En el corto plazo de un mes he estado en un tris de perder dos palabras, ¡maldita desmemoria! La próxima vez que esté a punto de olvidar herretes o gorgueras o lo que desafortunadamente se tercie, sea o no peregrino cactus, pensaré en Super Dante para que acuda en mi auxilio.

daniel rico dijo...

Me gusto mucho este concepto Dante:

"...la vida nos separa para siempre y los posteriores reencuentros, virtuales o físicos, son poco más que un intento, por lo general vano, de rectificar una historia con un final ya escrito."

Yo tambien sucumbi a la tentacion de viajar al pasado, con la secreta intencion de rectificar la historia, pero mis aventuras en Fasebook han sido de los mas frustrantes en ese sentido.

Un abrazo che!

Lirium*Lilia dijo...

Qué lindo encuentro... es un placer vivirlo con vos, nos hacés partícipes de todas tus anécdotas y vivencias.
Me suena el nombre María Julia Bertotto, seguramente como vestuarista...
Gracias por compartir esto. Se los ve re lindos en las fotos.
Ojalá anduviera por aquí el Súper Dante!
Un abrazo

F. Invernoz dijo...

Para mí, este post es una obra de arte literaria. Te explico y tengo varias razones. El texto se puede desmenuzar con varias interpretaciones que, en trazos rápidos y ligeros por imperio del tiempo, necesito analizar y explicar. Es una pulsión, vos me entendés. Así como sentiste ese impulso de auxiliar a una compatriota, a otro ser semejante, yo suelo reaccionar igual, a pesar de que se lo relacione equivocadamente con el servilismo. Los matices sobre el tango te van haciendo llegar a la orilla de la historia como si de un pequeño barco se tratara. Después, el encuentro que me hizo acordar, te lo cuento, (y perdón por la extensión de este comentario, es que sos un provocador literario que no deja indiferente a tus lectores) con una persona conocida. Encuentro, por otra parte, documentado con una foto con parte del pasado para la posteridad. Yo ya voy por los sin-cuenta o más y hace unos años localicé en España a un profesor que tuve en sexto de Primaria. Con diferentes sensaciones, me imagino, debió de haber sido ese encuentro tuyo. Y siempre presente el tango, universal y patético.

39escalones dijo...

Estupendo, amigo Dante, como relato de ficción no hubiese sido mejor. Las sorpresas (buenas) que la vida esconde tras cualquier esquina, peatonal, esperemos.
Abrazos.

Dante Bertini dijo...

ZBelnu:
estamos marcados por esos tangos que oímos desde la cuna. Hay tantos y suelen ser tan filosóficos y descriptivos que es imposible desprenderse de ellos. Nunca vi la peli de Lelouch, pero se que además de ese lugar común de "ya se lo que dices", habla de lo que yo digo aquí. Te llamo.


jnj:
si son catalanas lo tenemos difícil...no es mi fuerte.
Aunque SuperDante es imprevisible y se puede sacar de abajo de la capa casi cualquier cosa..
¡Zazaaaaaaaammmmmmmm!

Dante Bertini dijo...

Daniel:
es raro releerse citado por otro. Hace que nuestras palabras adquieran una resonancia distinta.
Face está bien, sin duda, pero no podemos imaginarla como una goma de borrar el tiempo... por desgracia.
Imagínate el éxito, el overbooking!!!
Sería carísimo...
Un abrazo

Dante Bertini dijo...

Deli:
te veo siempre revoloteando por Face y lo agradezco. Buena onda, de colores.
La Bertotto, como le decíamos los amigos teatreros, es escenógrafa, arquitecta, vestuarista y fue directora del Fondo Nacional de las Artes. Una currante incansable y talentosa. Mujer de Feinman, el filósofo.
Un día de estos SD agarra la capa y aparece por allí. Besos



FranK:
gracias. Me anonadas.
Ves más cosa que las que veo yo, seguro. Desde aquí parece menos interesante.
A veces nos dejamos llevar por una historia sin pensar demasiado los recovecos de ésta y sale algo así, que sólo pretendía ser un cuento para los amigos que me visitan y un recordatorio para esa memoria que siempre está amenazando con abandonarnos.
Nunca te cortes con los comentarios. Para qué hacerlo si el espacio es infinito y no estamos gastando papel.
Un abrazo

Dante Bertini dijo...

39Alfredo39:
has puesto el dedo en la llaga. Peatonal lo es ahora, pero según me cuentan más arriba el alcalde tiene previsto cambios.
¡Temblemos!
Te saludo y abrazo

Gise =) dijo...

Voglio ascoltarti!!!! quando??? sei pronto??? hai visogno di me per qual cosa????
Ti bacio!!!!

Fernando García Pañeda dijo...

Me ha parecido tierno y entrañable en lo improbable del encuentro y sobre todo en ese "seguir esperando algo más" todavía.
Y leeremos ese capítulo, espero.
Un abrazo.

Dante Bertini dijo...

Piccola Gise:
te has vuelto irremediablemente italiana?
Cuando vuelva de los madriles me pondré a lo de la radio, ya verás...Besos con mozzarella

Dante Bertini dijo...

Fernando:
como no vamos a esperar algo más?
Final tenemos asegurado, así que, al menos yo, quisiera que el partido durara bastante y los sets fueran muy divertidos
Creo que el virus deportivo atacó mis neuronas! Bochorno literario!
Abrazos

Gise =) dijo...

ME dio la vena hoy vos el tango yo la sangre italiana.... a los Madriles??? cuando te vaas??? disfrutalo mucho!!!
baciotto!!!!

Anónimo dijo...

Oye tío:¿cómo te atreves con Im yours? esa canción es mía, para que lo sepas.

Dante Bertini dijo...

Gise, me voy el viernes hasta el domingo o lunes, creo...
Presentamos el sábado por la tarde en la Feria del Libro una antología poética en tres idiomas : castellano, catalán y gallego.
Estoy, orgulloso, junto a Luis Eduardo Aute y otros grandes.
Besos

Gise =) dijo...

que endiva me das!!!!! me hubiera gustado estar en la Feria del libro para disfrutarte a vos a Aute, a Amaya Morera que firmaba su libro Lazos y Corbatas y para ver a Cenamor... a ver si vienen todos a Barcelona para la feria del Libro de aca....
Dusfruta mucho!!!!!

Mista Vilteka dijo...

Yo tengo en mi presente todos los que tuve en mi pasado. Y que siguen ahí. A no ser por una esporádica ventanita brincando por atención en la que se lee "Oye, cuánto tiempo". Sí, mucho, todo. Tanto que no recuerdo haberlo recordado después.

Beatriz dijo...

Buen reencuentro. Emocionan siempre.
Suerte en la Feria del Libro.
Gracias por el video, me gusta Jason Mraz -
Besos

Naia Marlo dijo...

Es emocionante reencontrarte con amig@s, que estuvieron años atrás en tu vida, de repente te llenas de una alegría especial. Donde se Compartió, creó y vivió...Lo digo por experiencia. En ralidad lo único que cambia en nosotros, es la textura de la piel, el color del pelo y poseer un carácter más maduro. Nuestra esencia es la misma. A veces, tenemos días que estamos sin estar, y nos movemos por inercia o posiblemente saboreamos con más intensidad las cosas que nos rodean. Gracias por el regalo en forma de video.
Madrid !! Madrid! Madrid!...mucha felicidad en la capital..

Un abrazo silencioso con aroma a claveles blancos,

Naia

Dante Bertini dijo...

Beatriz:
pensé que a lo mejor te encontraría en Madrid.
Una pena que no sea así.
Besos


Gise:
gracias, daré tus saludos si me cruzo con ellos. besitos. Nos vemos a la vuelta.

Dante Bertini dijo...

Mista:
supongo que hablas de la permanencia no física, tu recuerdo, porque si tienes la suerte de tener a todos realmente eres muy afortunado.
No se si habías estado antes.
Por si acaso, bienvenido.


Naia,
aromática amiga: espero que Madrid
me reciba con la misma cálida displicencia de siempre, aunque si agregan más aromas y especias me sentiré mejor todavía.
Que los ángeles te escuchen y sea un viaje tan placentero como el encuentro que narro aquí.
Una delicia de otra época. Ni siquiera podría asegurar que maduramos tanto.
Un abrazo primaveral con mirlos

Marina Judith Landau dijo...

Algo que siempre me encantó de vos es la naturalidad con la que contás las cosas, tus encuentros con gente famosa, tu pasado en el Di Tella, o que hiciste una experiencia de teatro con Grotowsky, por ejemplo... con la misma naturalidad que cualquiera cuenta que se encontró con la tía Pochita.
Creo que esto tiene que ver con tu amabilidad y actitud con la gente, también.
Es lindo encontrarse con gente del pasado y disfrutar un pedacito del presente. Sobre todo cuando el presente es bueno.
Me gustó mucho el post y las frases de tangos.
Besos.

Marina Judith Landau dijo...

Ah, hablando de recortes... ayer he peluqueado a Bruno (no aguantaba el calor con tanto pelo, pobrecito) Quedó lindo.
Chuik chuik

Naia Marlo dijo...

Uhmmm, gracias por este abrazo Dante. Para el finde te rodeo con uno aromatizado de jazmín. Tu bondad universal, llega sin llamarla ahí donde se precise. ¿necesitas una secretaria que te lleve la cartera y carpetas de notas?...:)

Feliz Feria del libro, féliz fin de semana, amigo mío
Acuchones a Fede..


Naia

Dante Bertini dijo...

Marina, como siempre, por dos:
cuento mi vida tal cual va apareciendo o tal cual la recuerdo...
He vivido bastante dramáticamente mis primeros años de juventud en Argentina, con más sabiduría los últimos veinte, precisamente desde que dejé de fumar!!!
Gracias por visitar siempre y con buen talante. Tú también me incluyes sin alharacas.
Me gusta el verbo peluquear.
Habrá fotos de Bruno?
Chuiquis!!!

Diana H. dijo...

Es un posteo entrañable, querido Dante. Los reencuentros... no me puedo extender tanto como lo haría si te tuviera frente a mí tomando unos mates. Me vienen demasiadas cosas a la cabeza y al corazón. A mí me pasó reencontrarme con una amiga después de 30 años... me encontré con los despojos de mi amiga. No físicamente, que estaba muy bien, sino que eran tan marcadas las evidencias de las renuncias a sí misma, a pesar del brillo material... uy, estoy peligrosamente nostálgica hoy. Mejor lo dejo acá.
Esas fotos también dicen mucho, ¿sabés? Reflejan casi toda la frescura de tus palabras.
Qué lindo post. Gracias.
Suerte en Madrid, otra vez.
Mis besos.

Dante Bertini dijo...

Naia:
merecido lo tienes, el abrazo, con ese desparpajado efluvio que dejas a tu paso!
Por ahora no necesito ni puedo pagar secretaria, aunque todo se andará. Hay tiempo.
Abrazo y acepto todos los buenos deseos

pepa mas gisbert dijo...

Me encanta lo que dices de festejar una boda a la que no fuiste y ni siquiera te invitaron. Una vez hice lo mismo, incluso mandé un regalo. Chula que es una (o tonta).

Un abrazo, me voy a Amorimas

Dante Bertini dijo...

Diana:
ese mate que nunca llega, llegará?
Preparo las valijas, que acá son maletas; una en realidad y muy pequeña, parece que el calor en Madrid es isoportable.
Mi encuentro no ha dado señales de recibo. Tal vez sufra el Jet-Lag, tal vez para ella el encuentro no fue tan satisfactorio.
Gracias por los buenos deseos.

Dante Bertini dijo...

Alma:
me encantó lo de "me voy a amorimás", te lo aseguro.
Como si fuera una estación, un pueblo o un país.

Yo llevé la tarta de chocolate.
Chulo que uno es.
Un abrazo con alma

Caruano dijo...

A mí me hubiera gustado reencontrarme con alguien de la manera que tú cuentas los reencuentros.
Abrazo.

Dante Bertini dijo...

Caruano:
gracias.
Este fue muy feliz.
Te mando un abrazo.

Noemí Pastor dijo...

¿Somos los mismos que fuimos hace décadas o nos convertimos siempre en otra persona? Le he dado muchas vueltas a esta pregunta y todavía no tengo respuesta. Diría que hay gente que sigue siendo como era y otra que se convierte en estereotipo.

Dante Bertini dijo...

Noemí:
no tengo una respuesta precisa. A veces se nos suavizan las aristas, otras veces se vuelven más agudas.
Los mismos, imposible. El espejo no nos permite mentir.

Emma dijo...

Pero esta historia es genial! Genial! Y os veis muy guapos. Pásalo bomba en Madrid tú que puedes, yo en Bruselas atrapada en el tiempo.

Ātman dijo...

Que alegría entrar en tu mundo blanco y resplandeciente (vengo de otras páginas donde estos días se ha desatado un ataque de Trolls, y hemos estado sumergidos en sesudas reflexiones sobre las negruras del ser humano) (lo pongo entre paréntesis para no contaminar). ¡Qué verso tan desenfadado y que bella secuencia, casi cinematográfica! Me lo leí con la música y quedé abducido. No se encuentra uno todos lo días con cosas así. Si ves a Aute, pregúntale cómo terminó la historia de aquella canción: si se quedó con esa mujer, o si los tres se organizaron. Y en Madrid: juego, set & match. Te reverencio. Hasta pronto.

Dante Bertini dijo...

Emma.
conocí esa ciudad hace unos 15 años, para la feria del libro a la que fui invitado. Me extrañó lo despejada y solitaria que se la veía. Podía pasearme durante horas sin cruzarme casi con gente. Había una crisis económica terrible y muchos locales cerrados a cal y canto. Me trataron mal y bien a partes iguales, aunque en muchos momentos me sentí pasando un examen sin piedad: no veían bien mis libros eróticos.
Te abrazo... y gracias

Dante Bertini dijo...

Átman,
no se cómo se verá desde afuera, ya que intento que todo aquí sea transparente: las horas y la vida se encargan de abatir mis obsesiones.
Creo saber de qué página hablas. Anduve por allí hoy mismo.
No se si tendré oportunidad de estar con Aute. Imagínate: si aparece, todos los demás desapareceremos y él será deglutido por sus admiradores.
Supongo que se han organizado. Si no nunca se hubiera atrevido a hacer pública esa historia.
Un abrazo y gracias por los buenos deseos.