Hace algunos días una visita anónima me dejó de regaloun video de Grace Jones cantando La vie en rose.
En aquel momento pensé:
MEJOR IMAGINARSE LA VIE EN ROSE...
YA SE ENCARGARÁ ELLA DE MOSTRARNOS TODOS SUS OTROS COLORES
Excesivo que soy, agiganto el tema acercándoles distintas versiones con las que teñir de rosa cada uno de los meses del año 2009.
Para este Enero, que todo y todos nos anuncian por demás oscuro,
MEJOR IMAGINARSE LA VIE EN ROSE...
YA SE ENCARGARÁ ELLA DE MOSTRARNOS TODOS SUS OTROS COLORES
Excesivo que soy, agiganto el tema acercándoles distintas versiones con las que teñir de rosa cada uno de los meses del año 2009.
Para este Enero, que todo y todos nos anuncian por demás oscuro,
la versión de su creadora, Edith Piaf:
http://www.youtube.com/watch?v=DUcJWaC-2Co&feature=related
Febrero y Marzo, irregulares, imprecisos, inestables,
Febrero y Marzo, irregulares, imprecisos, inestables,
merecen dos versiones de Grace Jones, una, posiblemente la primera, del año 1977:
La otra, de hace pocos años:
http://es.youtube.com/watch?v=modA9aa_ihA
Para mí la primavera será siempre Audrey Hepburn, así que para Abril les dejo su surrante versión de La vie en rose enfundada en el personaje de Sabrina:
Para mí la primavera será siempre Audrey Hepburn, así que para Abril les dejo su surrante versión de La vie en rose enfundada en el personaje de Sabrina:
http://www.youtube.com/watch?v=vydmcT9xLPw&feature=related
Hasta el 30 de Mayo, no te quites el Satchmo.
Todo el confortable y reconfortante calorcito de Louis Amstrong: http://www.youtube.com/watch?v=TbHAvBfmvFM&feature=related
El indefinible Junio pasénlo con Celine Dion.
Hasta el 30 de Mayo, no te quites el Satchmo.
Todo el confortable y reconfortante calorcito de Louis Amstrong: http://www.youtube.com/watch?v=TbHAvBfmvFM&feature=related
El indefinible Junio pasénlo con Celine Dion.
Podrá ser un poco distante, pero canta inobjetablemente bien:
http://es.youtube.com/watch?v=en5xf_Qq4sA&feature=related
Para el que será con toda seguridad un tórrido mes de Julio,
Para el que será con toda seguridad un tórrido mes de Julio,
un auténtico bochorno.
La estática, estereotipada Sara Montiel, cantando con el canalillo y las caderas: http://es.youtube.com/watch?v=vnRqP5I15nE
La estática, estereotipada Sara Montiel, cantando con el canalillo y las caderas: http://es.youtube.com/watch?v=vnRqP5I15nE
El aleonado Agosto se merece una auténtica fiera: Cindy Lauper http://www.youtube.com/watch?v=jNdi56FVAaQ&feature=related
Septiembre, otoñal, melancólico, nos trae a Olga María Ramos,
Septiembre, otoñal, melancólico, nos trae a Olga María Ramos,
reina del chotis, gran dama del cuplé:
http://es.youtube.com/watch?v=kHf8o-kDzcE
Para noviembre, el mes de mi cumpleaños, les dejo a un siempre
Para noviembre, el mes de mi cumpleaños, les dejo a un siempre
impredecible e inmenso Jack Nicholson:
http://es.youtube.com/watch?v=Ilu-Xpnt_J4
Como todo tiene un final, cierro el año del nueve con el sorprendente dúo de una pareja imposible: k. d. lang y Tony Bennet
Como todo tiene un final, cierro el año del nueve con el sorprendente dúo de una pareja imposible: k. d. lang y Tony Bennet
Y CON ESTO Y UN BIZCOCHO
¡DOY POR TERMINADO EL OCHO!


¡Esta semana he visto una película suiza!

Empecé a leer el libro de Brodsky casi al mismo tiempo que los noticieros de televisión nos mostraban a la bellísima ciudad italiana nuevamente inundada. ¿Y si para nuestra desgracia continuara hundiéndose? Estoy convencido de que lo haría con parsimoniosa inexorabilidad, como me gusta imaginar que se sumergió en las aguas del Atlántico la poeta argentina 


Vuelvo a la visita de mis, hasta ese momento desconocidas, amigas japonesas. Unos minutos después de mi llegada al hotel, algo respuesto de mi broncíneo shock, hicieron su aparición en escena Miho y Sakato. 
Libros con clásicos grabados eróticos japoneses -envío del ausente señor Toru-, postales y cuadernos diseñados por Miho, azucarillos de colores pastel, álbum fotográfico con un gato casi idéntico a Federico y más cosas y cositas que ahora mismo no recuerdo. Ellas, que después confesaron haberse burlado un poquito de mí, saludaron con las manos juntas sobre el pecho y repetidas inclinaciones de cabeza. Yo les respondí con unos cuantos amistosos besos a la argentina que las pusieron un poquito incómodas. Poco después Monsieur Ch. se unió al grupo y nos fuimos a comer tapa-tapa -Miho dixit- a un taperío cercano al hotel. Para mi sorpresa tenían menús en japonés. Como yo sigo con mi dieta comí una ensalada, mientras mis acompañantes se zampaban croquetas, tortillas y otras delicias fritas de la cocina española. 
Pido disculpas por ello. El domingo por la mañana nos fuimos de escalada con el Toyota de mi amiga Joyce. Queríamos mostrarles la ciudad desde lo alto del Montjuic y el Tibidabo, y como las alturas despiertan el apetito, en medio de uno y otro hicimos una escala con cafés y cruasanes (para ellos) en la Fundación Miró. Yo, que insisto con mi dieta, preferí saborear un delicioso descafeinado con edulcorante. El paseo les gustó más que a nosotros, algo incómodos por la notable falta de higiene de muchos rincones presuntamente verdes.
Nuestros diálogos ocuparían muy pocas líneas de este guión; muchas menos que todas las risas que soltábamos frente a nuestros intentos de comunicación oral. A media tarde nos despedimos, queriéndonos muchísimo más, frente al Templo Expiatorio de la Sagrada Familia. Como habéis podido comprobar, no hubo indecisiones amorosas, bodas suspendidas, sexo grupal ni escapadas en avión a Oviedo. Es que, a diferencia de la película barcelonesa del Woody, esta no contó con ninguna subvención del Ayuntamiento.
¡Vaya qué graciosillo estoy!, parafraseando en mi título al señor Woody Hereu... Y todo esto a pesar del mediocre hacer de los tenistas argentinos en Mar del Plata, tan rebosantes de soberbia como faltos de entrega, y de los comentarios desagradables de muchos periodistas españoles, decididos a hacer con este triunfo deportivo una gruesa cortina con la que cubrir los serios problemas sociales de un país y un mundo en crisis.
Quizás mi contento se deba a que el viaje por Murcia y el Levante español han llenado mi cuerpo y mi corazón de nuevas energías, casi tanto como Eva, José Miguel y Carlos, un amigo que conservo desde la adolescencia, llenaron nuestra estadía de afecto y nuestro auto de solares naranjas recién arrancadas de los muchos árboles que rodean su casa. Me gustó Murcia, me sorprendió Cartagena, me enterneció Orihuela, las tres con innumerables plazas meciéndose con suavidad al ritmo de sus fuentes de agua y rebosando de acacias, olmos, palmeras, palos borrachos, ombúes, ágaves y yucas. Por muy poco no me quedé pegado a la Plaza de la Catedral de Santa María, imponente y barroca, con un costado muy próximo a la escuela de Danza y Artes Escénicas y a su joven alumnado de estética Fame; o me quedo a vivir en plan clochard en la Plaza del Ayuntamiento, junto al río con su gran sardina varada -toda ella de un metal al que supongo bronce- y sus patosos patos auténticos, de carne, pluma y huesos.
Casi podría asegurar que esta gente murciana mima mucho a sus árboles. Nuestros amigos nos contaron cómo, hace ya algunos años, del inmenso ficus elástica de la Plaza de Santo Domingo se desprendió una rama que mató a un transeúnte. Otros ayuntamientos más demagógicamente vengativos hubieran talado el árbol para dar ejemplo a sus congéneres, pero el de Murcia decidió rodearlo de una especie de previsora glorieta circular que imposibilita la repetición de ese fatídico accidente.
Tal vez porque 



...solía levantarme tarde y con resaca. No necesariamente física, por supuesto. Había cumplido un año más, y el pescado, o la carne, seguía sin vender. Mi familia no era muy afecta a las fiestas de cumpleaños. Nunca sobraba el dinero y para seguir disfrutando de nuestra ajustada posición pequeño burguesa, se hacía necesario sacrificar unas cuantas cosas consideradas superfluas. Jorgito Abelleira, el único hijo de nuestros vecinos de la planta baja, apenas sabía escribir, dibujaba como el culo y no era ni la mitad de simpático que yo. Tampoco me ganaba en altura ni en belleza y eso de la inteligencia parecía no preocuparle demasiado. Sin embargo sus cumpleaños tenían siempre muchísimos más regalos que invitados. Era aquel un partido amistoso anual que siempre perdíamos los visitantes con un resultado humillante: Amigos dos, Regalos dieciocho. Un par de estos últimos los llevábamos Ricardito Arredondo y yo, el resto, los de verdad importantes, los ponían sus padres, que para algo eran los dueños de la mercería Yoly, la más surtida y transitada del barrio. Ricardito y yo, como buenos amigos íntimos que decíamos ser de Jorgito el mercero, odiábamos y necesitábamos su presencia a partes prácticamente idénticas. Entre otras cosas porque no había otro lugar mejor para jugar que aquella casa-trastienda siempre algo abandonada y caótica, llena de cajas con cierres de cremallera, con lanas, hilos y botones de todos los colores, con hebillas y plumas, con sobrecitos transparentes rebosando de lentejuelas, paillettes y ojales metálicos, un mundo, en fin, de cosas tan bonitas como, a juzgar por el éxito más que evidente del negocio, absolutamente necesarias. Allí, entre aquellas cajas polvorientas, debajo de una enorme mesa que nos dejaba a cubierto de las inquisitivas miradas adultas gracias a un largo mantel de hule verde estampado con estrellas y planetas de colores desvaídos, teníamos nuestras primeras experiencias de sexo grupal: mirar revistas de cine donde las estrellas mostraban sus hombros y canalillos en los estrenos y poco más que sus piernas y ombligos en las piscinas de sus mansiones. 
Este blog cumple dos años el mismísimo día en el que yo cumplo un año más.
Julia Roberts es la estrella (fugaz) de esta semana... Porque es de escorpio, como yo, y acaba de cumplir 41 espléndidos años hace unos pocos días...Porque es bella, buena actriz, su sonrisa ilumina cualquier escena y su mirada transmite credibilidad...Porque la canción de 

Pueden envidiarme si quieren. Anoche pude oír, y ver, a la imponente Jessye Norman desde una distancia de pocos metros, dos o tres a lo sumo. Cantaba en el Auditorium, y gracias a unos amigos -qué sería de nuestras vidas sin ellos-, pude asistir a este recital que posiblemente no vuelva a repetirse, con una primera parte dedicada a la ópera europea y una segunda a compositores estadounidenses tan conocidos como Leonard Bernstein, Rodgers y Hammerstein, Morton Gould y George Gershwin. La acompañaba la orquesta sinfónica del Teatro Liceo bajo la dirección de otra estadounidense: 

La red trae ecos de muerte.


Más silenciosamente, aunque con igual espectacularidad, la Obra Social de Caixa Catalunya muestra en las salas de exposición de la Pedrera, cerca de 250 obras de Alexander Ródchenko (1891/1956), otro vanguardista a ultranza. Pintor, diseñador gráfico, fotógrafo, exhaustivo investigador de las artes visuales, fue además diseñador de ropa revolucionaria, y, como sofisticado y certero publicista, ilustrador de los textos del poeta suicida Vladimir Maiakovski (

El canal CTK -los omnipotentes dioses de las transmisiones televisivas nos lo conserven por mucho tiempo- programó anoche dos películas donde la pena de muerte por ahorcamiento, pende, y nunca mejor dicho, como una amenazadora sombra sobre sus protagonistas. Dinero caído del cielo e Historia de un crimen -nombre con reminiscencias Garci(anas)- son los títulos que eligieron los distribuidores para la traducción castellana del atípico musical Pennies from Heaven (1981) y del demoledor biopic Infamous (2006), centrado este último en un momento específico de la vida de Truman Capote: el de la creación de la que fuera consideraba por los más importantes críticos literarios de la época como su obra cumbre, A sangre fría (In Cold Blood). ¿Les suena de algo toda esta historia? Es probable que sí, aunque si piensan en una película seguramente la confundirán con Capote (2005), otra producción americana casi gemela -no digo clónica porque no tengo información suficiente sobre la fecha de gestación intelectual de una y otra-, que resultó ganadora de un Oscar para la mejor interpretación masculina, la de Philip Seymour Hoffman en el papel del amanerado autor de El arpa de hierba y 




